Es importante recordar que, aunque el jugo fresco de papaya ofrece beneficios nutricionales, también es recomendable consumir la fruta entera para obtener la fibra completa. Además, si tienes alguna condición médica específica o estás tomando medicamentos, es aconsejable consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en tu dieta.
Comenzamos pelando la papaya, tratando de quitarle toda su concha. Asimismo, retiramos las semillas. Ahora, cortamos la papaya a la mitad, y luego la troceamos en pequeños trozos.
Es momento de colocar la papaya troceada en el vaso de la licuadora y vertemos unas 4 tazas de agua. Procesamos bien por un par de minutos e incorporamos la cantidad de azúcar deseada, además de la leche.
Continuamos procesando durante unos 5 minutos más y verificamos si se licuo bien. En este punto aportamos frescura, adicionando unos cubos de hielo y seguimos procesando.
Para ir terminando, vertemos el líquido obtenido en una jarra de jugo. Adicionamos la cantidad de agua restante y mezclamos bien.
Seguidamente, añadimos la esencia de vainilla y una pizca de sal. Removemos constantemente y con mucho cuidado de no derramar el líquido.
Finalmente, partimos el limón a la mitad y lo exprimimos sobre el fresco de papaya
Notas
Recuerda ajustar las cantidades de los ingredientes según tus preferencias personales. ¡Disfruta de estas refrescantes bebidas tropicales en cualquier ocasión!